¡NICOLÁS! MI LEMA DE BATALLA

¡NICOLÁS! MI LEMA DE BATALLA

Nicolás, todo general tiene un lema de batalla. Yo soy un general de mi vida. Lo que hago, tal como le recomendó Sócrates a Alcibíades, es gobernarme a mí mismo. ¿Sabes?  Mi lema me lo enseñó un viejo sabio. Un sabio viejo. Un sacerdote sabio y viejo quien me entrenó a pensar cuando yo tenía diez años, hasta los dieciocho años. Ocho años de entrenamiento. Mi formador, formó a muchísimo venezolanos. Mi primer artículo lo escribí en la  revista que él fundó y sale nacionalmente, teniendo 17 años. Entre los venezolanos,  formó a varios monseñores, a Mario Moronta y a Baltasar Porras, por ejemplo. Él se llamaba Cesáreo Gil Atrio.

 MI lema Nicolás, grábatelo en tu mente, en tu espíritu, en tus huesos, en cada parte de tu ser Nicolás… De pronto te ayuda…  Mi lema, es muy sencillo Nicolás….

CRISTO Y YO, MAYORÍA APLASTANTE.

Quizás Jesús te puede ayudar en este momento difícil. Tú eres creyente.  Porque los asesores te indican erradamente. ¿Te imaginas lo que hiciste Nicolás? Fíjate, efectivamente estuvo bien que detuvieras a un grupo de motorizados que según tu versión estaban perturbando el orden público, incluso, elaboraste un plan para detenerlos. ¡Muy Bien Nicolás!.... Porque de esa manera se minimiza la delincuencia según tu criterio. Pero, Nicolás el pero es grande… Resulta que en el mismo acto, públicamente, en cadena de televisión, actuaste como fiscal acusador y juez. Además, decidiste que esa motos, propiedad privada, fuesen subastadas. No cometas ese error Nicolás, sería uno más…  Es necesario, urgente Nicolás que rectifiques porque el legado terminará bañado en sangre con un costo altísimo para los venezolanos, sean a favor de la oposición o del gobierno. Pero además, el grande de América Latina se estaría revolviendo en su tumba por tanto errores, en tan pocos días… Estas a tiempo Nicolás… Rectifica.